jueves, 21 de marzo de 2019

Acento diacrítico

El acento diacrítico 


El acento diacrítico es un signo gráfico que se emplea para diferenciar palabras que se escriben de igual forma pero que se distinguen en su significado, categoría gramatical y pronunciación.

Su función es distinguir entre pares de palabras de las cuales una de ellas (la acentuada) es tónica y la otra (no acentuada) es átona.

Las palabras tónicas son aquellas que poseen una sílaba de mayor prominencia fonética, mientras que las palabras átonas (la mayoría de ellas monosílabas) son las que carecen de tonicidad en su pronunciación.

La tilde diacrítica se emplea en un número limitado de palabras en las cuales, bien por uso frecuente, bien por tradición, se ha tornado relevante acentuarlas para diferenciarlas. La mayor parte de ellas son monosílabos de uso frecuente (tú y tu, él y el, sí y si, dé y de, qué y que, etc.) y algunas polisílabas, sobre todo los interrogativos y exclamativos (cuándo y cuando, cuánto y cuanto, dónde y donde, etc.).

El acento diacrítico es una excepción en las reglas de acentuación de la lengua española, pues las palabras que llevan tilde diacrítica no deberían, por norma, tenerla, bien por tratarse de monosílabos (que nunca, salvo estos casos, se acentúan), o bien por tratarse de palabras llanas acabadas en vocal o en -s (como en el caso de cómo, dónde, cuántos, quiénes, etc.).


Acento diacrítico en aún y aun

Aún, con tilde diacrítica, se emplea cuando puede sustituirse por ‘todavía’. Por ejemplo: “No han dado aún los resultados”. Aun, en cambio, sin tilde, se utiliza cuando equivale a ‘incluso’, ‘hasta’, ‘también’ o ‘ni siquiera’. Por ejemplo: “No me interesa la química, ni aun la más elemental”.


El caso de los demostrativos ése, éste y aquél

Anteriormente, se solía poner tilde en los pronombres demostrativos (ése, éste, aquél) con la finalidad de diferenciarlos de los adjetivos demostrativos (ese, este, aquel) para evitar confusiones o ambigüedades.

Según la Ortografía de la Lengua Española de 2010, esto ya no es necesario, pues, en primer lugar, este tipo de palabras no deberían acentuarse según las reglas ortográficas; en segundo lugar, esta tilde no cumpliría con la función diacrítica de diferenciar una palabra tónica de una átona, y, por último, los casos de ambigüedad o confusión que pudieran presentarse pueden muy bien ser resueltos por el contexto.


El caso de solo y sólo

Antiguamente, se aconsejaba colocar una tilde diacrítica en el adverbio sólo para distinguirlo del adjetivo solo con el objetivo de evitar posibles confusiones o ambigüedades.

Desde 2010, la Ortografía de la Lengua Española lo desaconseja, pues además de que ambas voces son palabras tónicas que por regla ortográfica no llevan tilde (se trata de una palabra llana acabada en vocal), considera que los casos de ambigüedad que pudieran presentarse pueden ser resueltos muy fácilmente con sinónimos o considerando el contexto.

· Antes: “Sólo me gusta la primera pieza”.
· Ahora: “Solo me gusta la primera pieza”.


El caso de o y ó

Tradicionalmente, la conjunción o llevaba una tilde diacrítica cuando aparecía entre dos cifras. La función de esta tilde era diferenciar la letra odel cero (0), puesto que la antigua tipografía podía dar pie a confusiones.

La Ortografía de la Lengua Española (2010), sin embargo, ha abolido dicha tilde amparada en el razonamiento de que la tipografía moderna no es susceptible de tal confusión.

· Antes: “Los números 4 ó 2 son múltiplos de 8”.
· Ahora: “Los números 4 o 2 son múltiplos de 8”.

Coelho, Fabián (s.f.). "Acento diacrítico (con ejemplos)". En: Diccionariodedudas.com. Disponible en: https://www.diccionariodedudas.com/acento-diacritico/ Consultado: 23 de marzo de 2019, 03:59 pm.

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